Control Parental

Con equipos informáticos cada vez más modernos y un lenguaje que evoluciona rápidamente, los padres de hoy sufren la presión de tener una doble tarea: educarse para poder educar. Es indispensable poder asegurarles a los niños una experiencia sana y segura en Internet y darles a conocer todo lo que el ciberespacio ofrece.

¿Qué es el control parental?
Son programas de computadora específicos que se utilizan para poder administrar el contenido que se puede ver en Internet. De esta forma, es posible bloquear, para los usuarios de los menores de edad, ciertos contenidos en la web, o la cantidad de horas que se puede acceder al sistema. Las soluciones de seguridad antivirus y configuraciones en los navegadores, entre otros métodos brindan a los padres una manera de poder controlar los contenidos que los niños acceden mientras utilizan internet.

¿Cuáles son las principales amenazas propagadas?

Malware

Es el acrónimo en inglés de software malicioso (malicious software). El objetivo de este tipo de aplicaciones es dañar la computadora. En la mayoría de los casos, la infección ocurre por “errores” realizados por los usuarios, al ser engañados por el atacante. Los códigos maliciosos tienen distintas variantes: virus, gusanos, troyanos, spyware, etc. La diferencia entre las mismas radica en la forma en que se distribuyen: algunas veces se aprovechan de sistemas vulnerables y otras de usuarios poco precavidos.

Spam

El spam es el famoso “correo basura”. Son aquellos mensajes que no fueron solicitados por el usuario y que llegan a la bandeja de entrada. Normalmente, este tipo de correos contienen propagandas – muchas veces engañosas – que incitan al usuario a ingresar a páginas, con ofertas “milagrosas”, cuyo contenido es potencialmente dañino para el usuario.

Scam

Los scam son engaños o estafas, que se llevan a cabo a través de Internet. Se realizan de diversas formas como, por ejemplo, a través de correos no solicitados (spam), así como también a través de técnicas de Ingeniería Social. Estas últimas, intentan convencer al usuario de la prestación de un servicio cuando en realidad sólo quieren acceder a información confidencial. Un ejemplo son los mensajes falsos solicitando nuestra contraseña y clave de redes sociales a través de Internet.

Amenazas enfocadas a niños:

Ciberacoso

Es una conducta hostil que puede ser practicada hacia los niños. La víctima de este tipo de acosos, es sometida a amenazas y humillaciones de parte de sus pares en la web, cuyas intenciones son atormentar a la persona y llevarla a un quiebre emocional. Estas prácticas pueden ser realizadas a través de Internet, así como también, teléfonos celulares y videoconsolas. También denominado en inglés, cyberbullying, no siempre son realizadas por adultos, sino también son frecuentes entre adolescentes.

Grooming

Se trata de la persuasión de un adulto hacia un niño, con la finalidad de obtener una conexión emocional y generar un ambiente de confianza para que el niño realice actividades sexuales. Muchas veces los adultos se hacen pasar por niños de su edad e intentan entablar una relación para, luego, buscar realizar encuentros personales.

Sexting

Proviene del acrónimo formado entre Sex y Texting. Inicialmente, y como lo indica su nombre, se trataba del envío de mensajes con contenidos eróticos. Posteriormente, dado el avance tecnológico, esta modalidad evolucionó hacia el intercambio de imágenes y videos convirtiéndose en una práctica habitual entre adolescentes y niños.

Robo de información

Toda la información que viaja por la web, sin las medidas de precaución necesarias, corre el riesgo de ser interceptada por un tercero. De igual modo, existen también ataques con esta finalidad. La información buscada, normalmente apunta a los datos personales. Un paso en falso ante este tipo de incidentes, puede exponer al menor de edad a la pérdida de dinero familiar o al robo de identidad.

Algunas sugerencias para proteger a los menores de edad

– Utilizar herramientas de control parental. Éstas pueden ser aprovechadas tanto en los navegadores, así como también, en los programas de antivirus.

– No enviar información confidencial por Internet. La información confidencial jamás será solicitada por correo electrónico o por chat. Los bancos no solicitan los datos de su cuenta y mucho menos su PIN. Es importante, a su vez, que los niños no tengan acceso a este tipo de información.

– No contestar mensajes de acoso. En caso de que los niños reciban mensajes de acoso por Internet, es necesario instruirlo a no tomar represalias al respecto. Normalmente, el acosador busca este tipo de reacción en los niños para poder seguir fomentando su deseo de hacer daño. Además, los mensajes recibidos no deben ser eliminados, dado que constituyen la evidencia del acto.

Buenas prácticas de control parental

1. Asignar un usuario al niño. De esta forma, se puede controlar de manera eficiente las que éste realiza en Internet. El usuario administrador de un sistema debe ser siempre de un adulto.

2. Mantener actualizado la solución antivirus y la herramienta de control parental.

3. Monitorear el historial de navegación. De esta forma, se pueden conocer los sitios que visitan los niños y estar atento en caso de que figure alguna página indebida.

4. Controlar la cámara web, y asegurar que la misma esté desconectada mientras no se la deba utilizar.

5. Revisar las configuraciones de las redes sociales del niño. Un muro de Facebook compartido públicamente, sin limitaciones, puede ser un riesgo para la integridad del joven.

Conclusiones

Denegar el acceso a las tecnologías, no es una solución posible dado a que éstas son parte del día a día de los niños, y son cada vez más importantes para su crecimiento. Por lo tanto, los padres deben asistir el uso de las mismas y participar en la interacción del niño y las computadoras. Además, vale destacar que muchos de estos riesgos también pueden afectar a los adultos, por lo que muchas de las precauciones aquí descriptas, deberían realizarse siempre y para todas las edades.

29 de agosto de 2011

Fuente: ESET Security University

Enlace permanente a este artículo: http://www.ht-ar.com/blog/seguridad/control-parental/